Por: Judith Layme Ccolqque (15)
Promoviendo la inclusión de estudiantes con capacidades diferentes
Hablar de educación inclusiva ya no es solo una opción, sino una necesidad real. Incluir a niños y niñas con necesidades educativas diferentes en todos los colegios nos da la oportunidad invaluable de construir una sociedad más justa y empática.
En muchos centros educativos, la inclusión de estudiantes con discapacidad o con otros tipos de necesidades especiales todavía es vista como un reto, cuando en realidad debería ser entendida como la ocasión para resaltar los valores de todos sus compañeros y profesores.
Algunos de estos valores a destacar son: el respeto, la tolerancia, la paciencia y la solidaridad.
Los niños con estas dificultades deben ser tratados con igualdad por todos teniendo en cuenta la comprensión que esto puede necesitar, lo que requiere que todos estemos preparados para hacerlo con alegría.
La inclusión no debe recaer únicamente sobre los hombros de unos pocos. Es una responsabilidad que requiere el compromiso de todos nuestros colegios en su conjunto. La adecuación, la participación activa de las familias, y el trabajo con personas especialistas son pilares fundamentales para que esta integración sea efectiva.
Un colegio inclusivo no solo forma buenos estudiantes, sino mejores ciudadanos. En sus aulas no se construyen solo conocimientos, sino también principios de justicia social. La presencia de un niño con síndrome de Down, con autismo o con alguna dificultad de aprendizaje, lejos de “complicar” el aula, la enriquece
Nuestros compañeros con capacidades diversas también entienden, sienten como sentimos todos solo hay que saber entenderlos en trabajo conjunto con especialistas. Cuando un colegio se compromete seriamente con la inclusión, los resultados dan felicidad. No solo mejora el desempeño en el aula, también, nos permite conocernos más.
La diversidad no es una barrera, sino una oportunidad. Que incluir es crecer y conocer. Y que la escuela que abraza a todos sus estudiantes, sin excepción, es la escuela que necesitamos para transformar el mundo.
En realidad, todos tenemos el poder de cambiar las cosas para convertir lo que creemos que no está bien. En la inclusión de estudiantes todos deben ser aceptados en cualquier centro de educación ya que ellos también merecen la posibilidad de aprender.
